Comenzó en la barbería un poco antes de que llegará la pandemia, de ahí que cuando todo el mundo se paralizó, Omar Ortega Marcoleta encontró tiempo y una razón más para concentrar sus ganas en este rubro que tanta curiosidad le despertaba. Así, decidió comenzar a tomar cursos online y convalidar su carrera como músico e ingeniero en sonido, con los trabajos a domicilio que le pedían.
Al tiempo, llegó a trabajar en una de las grandes barberías de la quinta región 'The Wolf'."Había un vacante para trabajar en barbería y me di cuenta que si quería ser profesional tenía que estar con los grandes, con los mejores. Para inspirarme, renuncié a mi trabajo y así sentir que no había más opción que ganarme ese puesto", nos cuenta.
"Como me faltaba experiencia me dieron la oportunidad de ser asistente, barría, colocaba toallas calientes y me encargaba del aseo de la barbería; mientras miraba a los demás y aprendía. Hasta que un día supe que ya tenía el nivel suficiente para poder abrir mi agenda para cortar cabello, y a los 3 meses de haber llegado comencé a trabajar definitivamente como barbero", agrega.
Desde ahí, Omar no ha parado y su compromiso y dedicación lo han llevado lejos. Y es que además de ser uno de nuestros embajadores y creadores de contenido, fue uno de los barberos seleccionados para viajar a Argentina a capacitarse y conocer las diversas instalaciones de nuestra marca en dicho país.
"Siempre he buscado un propósito en mi vida y siempre he tenido el afán de comunicar, relacionarme y aportar. La barbería es un mundo en el que puedo aplicar al 100% este deseo".
¿Cómo sientes que ha evolucionado el hombre en cuanto a cuidado?
Va en subida, siempre estuvo el estigma de que el hombre no se cuida y que es cosa de mujeres, sin embargo, al criarme solo con mujeres entendí que el cuidado va más allá del género, y tiene que ver tanto en la imagen como con lo emocional.
Amigos cercanos dudaban de cortar su cabello, cuidar su piel o aplicarse acondicionador. Si bien es súper válida la opinión de todos; hay que enfatizar en que no hay nada de malo en que un hombre se cuide, creo que hay que fomentarlo y nos puede sumar bastante a nuestra seguridad y autoestima.
¿Cómo conociste la marca Sir Fausto?
Sir Fausto fue el primer shampoo de barba que utilicé y fue la solución para que mi hija en vez de alejarse, me acariciara para quedarse dormida... Ahí comprendí que había algo distinto, lo relacioné con algo importante y me interesé por conocer más de la marca ya que en ese entonces la barbería en la que trabajaba, solo distribuía el shampoo y after shave.
¿Qué destacarías de nuestro productos?
La calidad y la garantía. Sir Fausto es una marca que no deja espacio para la duda, realmente funciona a diferencia de otros productos que solo prometen. Además tienen un 100% de garantía, un compromiso que es difícil ver hoy en el mercado.
¿Cuál es tu favorito?
El shampoo de barba es al que le tengo más cariño, ya que como les contaba, me ayudó a poder estar cerca de mi hija sin que le pinchara o le raspara la cara. Tiene un valor más emocional. Por otra parte. y si bien no soy usuario habitual de pomadas, la Hybrid Clay es la que más disfruto y recomiendo.
¿Qué mensaje le darías a quienes están pensando en ser barberos o dedicarse a este rubro?
Que no se están equivocando, háganlo con todas sus fuerzas y se darán cuenta que además de dar frutos personales, también estás aportando a las personas. Siempre vi esto como una responsabilidad, ya que puedes hacer que alguien con un bajo autoestima se levante de tu silla con una sonrisa y eso no tiene precio. Háganlo, y no se olviden de la disciplina, compromiso, humildad y actitud.
Por último, ¿qué mensaje le darías a quienes aún no se animan a probar los productos Sir Fausto?
Arriésguense, tienen 100% de probabilidad de que les guste y obtengan un buen resultado. Además, qué mejor que comenzar a cuidarte con una marca que tiene tanta garantía en cuanto a su calidad y resultados.
