Si eres inviernista, lo sentimos mucho, pero hay una realidad que debemos asumir: el frío es uno de los grandes enemigos de la piel... Sí, así como lees, y es que la exposición a bajas temperaturas puede provocar deshidratación cutánea. De ahí que nuestra epidermis necesite estos meses cuidados especiales, para evitar la sequedad extrema.
Ahora, si al frío le sumamos el viento y el afeitado diario estamos frente a un problema mayor. Pero tranquilo, que escribimos este artículo para que tu piel no sufra las consecuencias, y puedas lucir excelente.
¿Y entonces qué debes hacer? Seguir leyendo y poner en práctica estos consejos:
1.- Hidrata tu piel al máximo, y de todas las formas posibles. Ya sabemos que tomar mínimo dos litros de agua al día nos ayuda (y no sólo a la piel, sino que a todo el organismo), pero a esta acción debes sumarle un producto cuyos ingredientes contengan principios activos que ayuden a hidratar y nutrir la piel en profundidad.
Nuestro recomendado es el Serum D-tox Sir Fausto, que brinda elasticidad y aporta aminoácidos de origen natural. Y si tienes barba, no debes olvidar que bajo tus pelos hay piel, por lo cual no te olvides de tu Aceite Esencial Sir Fausto, que contiene aceite de almendra un regenerador natural de colágeno y elastina que le hará muy bien a tu rostro.
2.- Dúchate con agua más fría. Sabemos que en este momento creerás que estamos locos, y lo entendemos: las duchas calientes por la mañana resultan increíbles; el problema es que el agua a altas temperaturas deshidrata la piel, elimina la humedad y los aceites naturales que esta necesita para mantenerse suave y tersa.
También es fundamental que uses jabones y limpiadores con ingredientes que cumplan una función hidratante. ¿Sabías que en Sir Fausto tenemos un gel de ducha? Te lo recomendamos, ya que además de ser libre de sulfatos, suave y de agradable espuma, posee un efecto suavizante, revitalizante y nutritivo.
3.- Dime qué comes, y te diré cómo es tu piel… Mejora tu alimentación, aléjate de la comida envasada y llena de conservantes, e incluye productos ricos en nutrientes. Tu cuerpo necesita frutas y verduras para conseguir las vitaminas necesarias para tu piel.
4.- ¡Ojo con la calefacción! Las calefacciones resecan muchísimo la piel, ya que el aire caliente acaba lentamente con la humedad, deshidratándola.
5.- Incluye un humidificador en tu próxima lista de compras. Cuando los niveles de humedad descienden en el ambiente, la piel se seca, por eso contar con este tipo de productos evitará la creación de un ambiente con poca humedad, y por ende, evitará la deshidratación, irritación, descamación, producción excesiva de sebo y el envejecimiento prematuro de tu piel.
Además te aseguramos que mejorará la calidad del sueño, y si duermes mejor, tu organismo también lo estará.
6. Protege los labios.
Los labios también forman parte de tu rostro, aunque los olvides. Por eso, en este invierno incluye en tu rutina un bálsamo para mantenerlos sanos y humectados. Además, recuerda que es muy importante exfoliarlos al menos una vez a la semana.
Ahora, ya tienes seis consejos imprescindibles para cuidar la piel, y como bonus, tampoco olvides cubrir parte de tu rostro con gorros y bufandas.